gruta de los helechos

Um passeio legal e um tanto diferente pra quem curte apreciar a natureza e todos os seus detalhes... vale a pena

Si te gusta la naturaleza, pasear entre arboles autóctonos, vegetación variada, caminatas, y observar helechos gigantes, tenes que visitarlo!

Es como debe haber sido el territorio antes de la colonización y el ingreso de otras especies de árboles. Una zona de quebradas, monte indígena, arroyos de agua pura y estanques. Es dificil de saber donde es, hay que ir con alguien que conozca. La ruta hacia el lugar vale la pena, es muy pintoresca con interesantes vistas. Ir con calzado adecuado para terreno escarpado. El paseo lleva medio dia, saliendo desde la ciudad de Tacuarembó, si se lo quiere visitar bien.

Es un lugar hermoso para visitar. Un microclima fantástico. Lo malo es que el campo es privado y a veces no es fácil entrar porque no hay nadie. Hasta hace poco había un cuidador que se jactaba de sacar a los tiros a quienes se metían sin permiso.

paseo de aventura, descenso por ladera de un poso donde corren hilos de agua entre una tupida vegetación, ir con calzado y ropa cómoda.

Si estas en la vuelta, queda cerca de Tacuarembo y cerca del Valle EDEN. Tacuarembo es un departamento con mucha naturaleza y es parte del Uruguay profundo

Es raro escribir sobre una atracción natural a la que en el día de hoy no se puede acceder. De todas maneras sirve para alertar a aquellos que la quieran encontrar.La denominada gruta de los helechos es en realidad una quebrada por la que corre un curso de agua de poco caudal rodeado de bosque nativo cerrado (el mismo se caracteriza por la presencia de arbustos y árboles achaparrados que forman una especie de galería). Allí se crea un microclima especial, húmedo, que favorece el crecimiento de líquenes y helechos, que llegan a tener dimensiones importantes. En alguna época incluso había una persona que oficiaba de guía del lugar y no cobraba nada por visitarla. Esta quebrada se encuentra situada en una propiedad privada. Cuando llegamos a la misma, nos encontramos con una portera (portón de campo), cerrada con cadena y candado. Justo en ese momento pasaban por la ruta unos paisanos con una tropilla de caballos a quienes preguntamos si podíamos pasar y nos contestaron que sí.Ya en el predio seguimos las indicaciones que nos había dado el paisano y las que habíamos encontrado en algunos sitios de internet.En fin, estuvimos casi dos horas tratando de encontrar una entrada a la quebrada y nos fue imposible. Incluso llegamos a encontrar una trilla que se adentraba unos metros en la misma, escuchándose el murmullo del curso de agua, pero que luego se cerraba por la vegetación.Lo único que logramos fue poner nervioso a un grupo de vacas y toros que pastaban en la pradera.Más tarde de regreso al camping donde nos alojábamos, un amigo oriundo de la zona, nos contó que el paso a la gruta estaba cerrado por la vegetación, por falta de uso. Esto se debe a que algunas personas que iban a visitarla dejaban abiertas las porteras en el predio y los animales se escapaban, o dejaban basura, o lo que es peor incluso robaban algún animal. Como consecuencia, el dueño de la propiedad decidió cerrar la portera de ingreso a su campo (de ahí el candado que encontramos a la entrada), el guía ya no existía y como resultado el crecimiento de la vegetación hizo que se perdiera el camino de ientrada a la gruta.Lamentablemente una maravilla natural de la cual por ahora no podremos disfrutar